Nunca es tarde si la dicha es buena. Formarse académicamente y seguir aprendiendo es algo para lo que nunca es demasiado tarde. Es más, siempre aprendemos algo de una u otra manera. La vida es un continuo aprendizaje en sus múltiples formas. De tal modo que no hay un momento exacto para acceder a la formación superior o cualquier tipo de formación que sea de nuestro interés. Desde cursos y talleres de todo tipo hasta carreras universitarias, están al alcance de cualquiera que se lo proponga. Tanto si estas dentro de la edad obligatoria como si has pasado por la vida sin pisar un centro de estudios, sea por la razón que sea, puedes seguir formándote.
En este artículo vamos a hablar de la formación universitaria y las distintas formas de acceso a ella a las que podemos optar. Aunque lo más común es pensar en hacer la antigua selectividad y actual EVAU para acceder una vez cursados los estudios de bachillerato correspondientes, existen más formas de acceso. Entre ellas podemos encontrar, incluso la posibilidad de entrar sin realizar la exigente prueba de acceso.
Si eres de los que no han podido continuar con su formación académica por diversas razones y ya has cumplido los veinticinco años o los pasas de largo, puedes optar por matricularte en cursos especializados para acceder a la universidad como los que ofrece el Centro Universitario San Bernardo, enfocados en exclusiva para acceder a la universidad o prepararte las pruebas por tu cuenta. En cualquier caso, la posibilidad de acceder a la universidad en cualquier etapa de la vida existe y son muchas las personas que retoman sus estudios para sacarse la carrera de sus sueños.
Constancia, perseverancia y ganas, son algunos de los ingredientes necesarios para continuar con la formación en estudios superiores y alcanzar esa meta o sacarte la espinita que se te quedó clavada. Veamos a continuación cuales son las diferentes formas de acceder a la formación universitaria.
Diferentes requisitos, diferentes vías de acceso
Para cada forma de acceso a la universidad, existen una serie de requisitos, por igual, diferentes. En función de la formación adquirida previamente, la edad e incluso la experiencia laboral, la entrada a la universidad se hace por un camino u otro. Así mismo, las diferentes universidades, pueden disponer de vías de acceso particulares.
Como ya comentábamos con anterioridad, lo más habitual es pensar en la vía de acceso más conocida, tener el título de bachillerato y superar la prueba de acceso a la universidad conocida como EVAU. Sin embargo, existen otras opciones en las cuales no es necesario disponer de la titulación de bachillerato para acceder. De tal manera que las diferentes opciones o vías de acceso requieren de cumplir con alguno de los siguientes requisitos:
- Disponer del título de bachillerato y superar la EVAU.
- Contar con una titulación de Técnico Superior de Formación Profesional.
- Superar la prueba de acceso a la universidad para mayores de veinticinco años.
- Tener más de cuarenta años y tener experiencia profesional relacionada con la titulación universitaria que se quiera estudiar.
- Superar la prueba de acceso a la universidad para mayores de cuarenta y cinco años.
- Para estudiantes extranjeros, disponer de estudios homologados o equivalentes al bachillerato.
Todos estos requisitos y vías de acceso cuentan a su vez con una serie de criterios y pruebas específicas que realizar en función de la edad o el itinerario de cada individuo como vamos a explicar a continuación.
La EVAU o evaluación para el acceso a la universidad, sustituye a la antigua PAU (prueba de acceso a la universidad) conocida como Selectividad. Esta prueba tiene la finalidad de evaluar las capacidades del estudiante y verificar si disponen de los conocimientos necesarios para cursar con existo los estudios universitarios. La prueba se suele realizar en la universidad asociada al centro en el que se hayan finalizado los estudios de bachillerato. Una vez superada la prueba, se obtiene acceso para estudiar en cualquier universidad.
Si cuentas con una titulación en técnico superior de FP, no es necesario realizar la EVAU para acceder a la universidad, salvo que quieras subir la nota. Con la entrada en vigor de la LOMCE se eliminó la necesidad de realizar la prueba de acceso a la universidad, además de tener prioridad a la hora de acceder a ciertos grados por la afinidad de contenidos que componen la carrera. Cabe señalar en este punto que hay que tener en cuenta que puede existir una nota de corte en función del número de plazas ofertadas y la demanda de las mismas.
Otra de las formas de acceso más conocidas es el acceso a la universidad para mayores de veinticinco años. Para los aspirantes que se encuentren en esta situación, no es necesario disponer del título de bachillerato. Basta con tener cumplidos o cumplir los veinticinco años en el año en el que se realiza la prueba y carecer de titulación que permita el acceso a la universidad por otra vía. La prueba puede realizarse en la universidad de elección y una vez superada permite el acceso a cualquiera de las universidades españolas. Aunque es aconsejable realizar la prueba en la universidad en la que se pretende estudiar ya que las mismas universidades pueden establecer criterios que beneficien a quienes realicen allí el acceso.
Cuando pasas de los cuarenta y cinco años, también es posible acceder a la universidad. En este caso, hay que superar una prueba de acceso mucho más sencilla que la que se realiza para los veinticinco y se hace de forma exclusiva en la universidad elegida para estudiar. Aparte de superar la prueba, hay que realizar una entrevista personal.
Para aquellos que tienen cuarenta años y cuentan con experiencia profesional relacionada con el grado universitario que se pretende estudiar, el acceso se limita a acreditar dicha experiencia y superar una entrevista personal.
También es posible acceder a una carrera universitaria desde otra carrera. Esto especialmente importante en los casos en los que, debido a la nota de corte, no se haya podido obtener plaza en la carrera de elección. El estudiante puede optar por cursar otra carrera y realizar el cambio con posterioridad, siempre cumpliendo el requisito mínimo de superar al menos treinta créditos en la carrera que se esté cursando.
Los estudiantes extranjeros también pueden acceder a las universidades españolas, siempre y cuando estén en posesión de la titulación homologada o equivalente al bachillerato.
El proceso de admisión a la universidad
Contando con que se cumplen los requisitos necesarios para acceder a la universidad, con independencia de la vía de acceso elegida, debe solicitarse el acceso a la universidad de elección. El proceso se suele iniciar en junio o julio, eso va en función de la universidad. En ese momento hay que presentar la solicitud de admisión junto a toda la documentación necesaria. En ella habrá que especificar los grados que se quieren estudiar por orden de prioridad.
Todas aquellas titulaciones en las que existan más solicitudes que plazas, utilizan como criterio de admisión la nota del alumno. Se ordenan las solicitudes por nota de mayor a menor, hasta completar las plazas. La nota de admisión del último alumno admitido establecerá la nota de corte. A mayor demanda de plazas en el grado universitario, mayor nota de corte.
Así mismo, las universidades reservan plazas de cada uno de sus gados para cada una de las diferentes vías de acceso. El porcentaje de dichas plazas depende de cada universidad, no obstante la estimación general es la siguiente:
- Entre el uno y el tres por ciento se reservan para estudiantes ya titulados.
- Un mínimo del dos por ciento para aquellos aspirantes que hayan superado la prueba de acceso para mayores de veinticinco.
- Entre el uno y el tres por ciento, se reserva para estudiantes mayores de cuarenta años con experiencia profesional y aquellos que superen el acceso para mayores de cuarenta y cinco.
- Un cinco por ciento de las plazas ofertadas se reserva a estudiantes con discapacidad.
- Un porcentaje mínimo del tres por ciento, se reserva para deportistas de alto rendimiento.
El resto de las plazas ofertadas, se destinan íntegramente a los estudiantes que acceden a la universidad a través de la EVAU o los que disponen de la titulación de Técnico Superior de FP.
Acceder a la universidad es posible sea cual sea el momento vital en el que te encuentres y tu situación académica particular. Los requisitos de adaptan a las particularidades de cada aspirante, ampliando las posibilidades de entrar a formar parte de una formación universitaria. Esto no quiere decir que estudiar una carrera universitaria sea más sencillo si accedes desde una vía o desde otra. La forma de acceder, puede ser más fácil, pero la formación universitaria va a ser la misma para todos, con lo que es necesario hacer un esfuerzo constante para sacar adelante los estudios. En este sentido, siempre lo tendrán más fácil los estudiantes que siguen con su formación que aquellos que acceden por otras vías y tienen otra serie de responsabilidades. En cualquier caso, querer es poder y la actitud es fundamental para alcanzar el objetivo graduarse en la universidad.